Ordóñez explica por qué Torreguadiaro y Cala Sardina no cuentan con banderas azules

Jueves, 15 Mayo 2014

El teniente de alcalde delegado de Seguridad Ciudadana, Juan Manuel Ordóñez, ha explicado hoy, jueves, que si este año no ondearán las banderas azules en las playas de Torreguadiaro y Cala Sardina “no será por un descenso en la calidad de las aguas o por un deterioro del servicio que se presta desde el Ayuntamiento. Se debe a que la organización que las concede (Adeac) ha incluido como requisito que Protección Civil no puede encargarse del servicio de salvamento y socorrismo. La alternativa es, pues, contratar a una empresa especializada”.

EXPLICACION BANDERAS AZULES 15 MAYO 2014

Para el edil responsable de Protección Civil, “en los pasados cuatro años los socorristas voluntarios de Protección Civil han demostrado repetidamente su valía, rescatando a bañistas en situaciones de gran peligro, de manera que ninguno ha fallecido. Asimismo, la atención sanitaria, tanto en la arena como en el traslado a los centros sanitarios, ha salvado varias vidas y mitigado daños en numerosos casos. Por lo tanto, desde el Ayuntamiento preferimos invertir en mejorar lo que tenemos y que funciona bien que gastar más dinero en una empresa externa que, como es lógico, querrá obtener beneficios. Quiero recordar que esta decisión se tomó por primera vez, y considero que de manera acertada, durante el mandato del anterior alcalde, Fernando Palma”.

Ordóñez señaló que “aunque lamentamos no contar con estas banderas azules, también consideramos que no hay mejor enseña para nuestras playas que prestar en ellas un servicio de la máxima calidad. De hecho, los usuarios de nuestras playas notarán la inversión que se ha hecho este año para renovar equipamiento, como pasarelas y módulos, así como la limpieza diaria que se ha encomendado a 30 operarios contratados por Emadesa, la mitad de los que se incluyen en el plan de trabajos de temporada”.

“En cuanto al salvamento y socorrismo -agregó-, el año pasado se encargaron de esa tarea más de 80 personas, que contaban con la formación necesaria. No descartamos incluso incrementar este año el número, de manera que pocos municipios españoles podrán enorgullecerse de un dispositivo de seguridad en sus playas de esta magnitud. Eso sí, el coste será similar al del año pasado, unos 120.000 euros. Quiero recordar que hace seis años, cuando este servicio se contrataba a una empresa, la cantidad ascendía a 600.000 euros”.

“Estoy seguro -indicó el responsable de Protección Civil- de que tanto los usuarios, sanroqueños y del resto del Campo de Gibraltar, que habitualmente se acercan a nuestras playas lo seguirán haciendo aunque no tengamos banderas azules. En cuanto a los visitantes del resto de España y extranjeros, también seguirán utilizándolas porque normalmente se alojan en la amplia oferta hotelera y de turismo residencial de la que disponemos en el municipio”.

“Es cierto que preferiríamos disponer de nuevo de las banderas azules -reconoció Juan Manuel Ordóñez-, porque son un distintivo de calidad que no podemos obviar. Pero, en un municipio con 4.300 personas desempleadas, desde el Consistorio tenemos que apostar por ofrecer los mejores servicios al menor coste posible, para invertir ese ahorro en políticas sociales que beneficien a los más perjudicados por la crisis. Una cuestión en la que el Ayuntamiento de San Roque puede sacar pecho, como lo demuestran hechos tan palpables como el plan de trabajos de temporada, que ha supuesto la contratación de 61 parados durante seis meses”.

En agosto del año pasado, la Asociación de Educación Ambiental y del Consumidor (Adeac) retiró ambas banderas azules por las mismas razones que este año no se han solicitado desde el Ayuntamiento. De hecho, esta enseña desapareció entonces de 17 playas españolas, once de ellas andaluzas. Hay que apuntar que a la playa de Alcaidesa-Torrecarbonera, que comparten San Roque y La Línea, sí se le ha concedido la bandera azul este año. También ha repetido bandera azul Puerto de Sotogrande, si bien la gestión de las instalaciones corresponde a la iniciativa privada, no al Ayuntamiento.