El próximo lunes comienza la séptima edición del “Caminacole” del CEIP San Bernardo

Organizan la AMPA del centro, la Tenencia de Alcaldía de la Zona Interior, con Juan Manuel Ordóñez al frente, la Delegación Municipal de Educación, dirigida por la edil Belén Jiménez, así como el propio CEIP San Bernardo y la Asociación de Vecinos “La Piedra Gorda”.

Ordóñez explicó que “desde que se planteó el primer año, desde la Tenencia de Alcaldía hemos colaborado con esta actividad, porque es muy positiva tanto para los alumnos como para la vida de la barriada de la Estación. Durante los días en que se desarrolla disminuye mucho el tráfico a la hora de entrada y salida a clase, lo que se nota en el ambiente y hasta en el humor de todos. A los niños les viene muy bien, y los profesores dicen que hasta mejora su concentración. Son muchos beneficios, así que es importante que Caminacole siga teniendo el apoyo municipal en el futuro”.

Por su parte, Belén Jiménez, indicó que “Caminacole se enmarca en las actividades relacionadas con hábitos y vida saludable que se llevan a cabo en el Colegio San Bernardo, un centro muy participativo en la vida de la barriada de la Estación. Es importante que desde el Ayuntamiento contribuyamos en estas iniciativas tan positivas, porque no sólo redundan en la educación en valores de los estudiantes, sino que incluso sus beneficios van más allá de las aulas y llegan a las familias”.

Las ventajas de acudir al colegio sin utilizar los vehículos a motor son claras, ya que por un lado se reduce el tráfico y la contaminación en la barriada. Pero, además, al ir andando o en bicicleta los estudiantes incrementan su actividad física, desarrollan relaciones sociales, amplían su círculo de amistades con participantes de otros cursos, aprenden a ser peatones, conocen mejor la barriada y sus vecinos y, además, demuestran una mayor concentración en clase.

“Caminacole” surgió debido a las quejas vecinales por la saturación de los vehículos a motor que se producía a la entrada y a la salida de los niños al colegio. A raíz de las reuniones entre la asociación “Piedra Gorda”, el AMPA y el centro educativo, se decidió crear este proyecto.

Así, los escolares van sellando día a día una cartilla como control, y si la cumplimentan durante las dos semanas que dura la actividad reciben un regalo. Además, a final de curso se realiza un sorteo entre los participantes y los ganadores obtendrán premios. Paralelamente, durante estos días se realizarán actividades en el huerto escolar, que se plantó hace tres meses.