de San Roque
La selección española junior masculina capitaneada por el sanroqueño Andrés Villena, se impuso a Eslovenia 2-3 en la segunda jornada del Torneo de Clasificación para el Campeonato de Europa que se está disputando en la República Checa. En un partido igualado hasta la extenuación y disputadísimo, con un final auténticamente cardíaco, España demostró toda su calidad y su extraordinaria garra y se llevó el triunfo en un tie-break de infarto (24-26).
Los pronósticos se cumplieron y Eslovenia creó muchísimos problemas al combinado español, en un partido que tuvo como nota predominante la extrema igualdad. El intercambio de puntos fue una constante y los dos primeros sets fueron un calco, si bien terminaron con resultado opuesto, ya que mientras que el primero se lo llevó Eslovenia 25-23, el segundo fue para España por igual resultado. Tras el triunfo parcial de España, Eslovenia mandó con claridad en el tercer set. Los remates de Domen Kotnik y bloqueos eslovenos pusieron al conjunto rival por delante en el marcador y la diferencia fue suficiente para que colocasen el 25-21 Y cuando peor se ponías las cosas para la escuadra nacional, apareció la garra de los españoles. Los actuales subcampeones del mundo juvenil demostraron todo su potencial en el cuarto set, que dominaron de principio a fin. Juan Manuel González lideró el ataque español para cerrar el set y dirigirlo irremediablemente a la lotería del tie-break (19-25) Las constantes del partido se mantuvieron en la muerte súbita. Eslovenia tomó la iniciativa en los primeros compases, pero España logró mantenerse a corta distancia (6-4). Tan escasas eran las distancias, que los españoles no tardaron en forzar el empate (7-7). A partir de ese momento, la igualdad se mantuvo irreductible, sin que ninguno de los dos equipos fuese capaz de imponer su dominio. En la fase decisiva del set, Eslovenia tuvo la suerte de cara y encadenó una racha que le permitió sacar una efímera ventaja de dos puntos 14-11. Y nuevamente España mostró su mejor imagen, plena de garra y de lucha colectiva, para conseguir salvar nada menos que seis balones de partido. Los españoles demostraron una sensacional entereza para devolver el empate al electrónico cuando parecía que la victoria era tarea eslovena (17-17). El set se eternizó; ninguno de los dos equipos dio su brazo a torcer y los puntos se sucedieron. Pero España tuvo recompensa a su extraordinario esfuerzo y a su constante lucha. En un final de set de infarto, los pupilos de Ricardo Maldonado pusieron el 24-26 que suponía la victoria final. Gran demostración de poderío de los españoles. La selección junior ha dado un paso de gigante para estar en el Europeo. España disputará una verdadera prueba de fuego el viernes, contra Francia, a priori el rival más duro de grupo por ser el actual subcampeón de Europa y en principio el enemigo a batir para los nacionales. El encuentro será vital para los intereses de los de Ricardo Maldonado y promete ser apasionante.