Nueva 63 alberga la segunda parte de la exposición “El artista y su mundo” de García Trevijano

Numeroso público asistió en la tarde del jueves a la inauguración de la segunda parte de la exposición “El artista y su mundo”, del pintor sanroqueño Antonio García Trevijano Fernández, que estará abierta hasta el 30 de septiembre en el Espacio Cultural Nueva 63. Hay que recordar que la primera parte de esta muestra pudo verse en el mismo local desde el 18 de julio.

La teniente de alcalde delegada de Cultura, Ana Ruiz, se contó entre los asistentes a la inauguración, y tuvo la oportunidad de conocer la obra de la mano del mismo autor. La edil felicitó a García Trevijano por esta exposición, y a la responsable de la Nueva 63, Mercedes Sánchez, por complementar con numerosas actividades la amplia oferta cultural del Ayuntamiento.

El pintor, por su parte, explicó que los cuadros de las dos partes en las que se divide “El artista y su mundo” le han llevado cinco años de trabajo, y en ellos reflexiona sobre su experiencia vital. Apuntó que, para hacer más fácil la comprensión del espectador, cada pintura contiene explicaciones, aunque reconoció que le gusta que quien contemple su obra saque sus propias conclusiones.

Finalizó destacando la gran cantidad de recursos culturales con los que cuenta San Roque desde hace unos años, una situación muy distinta a la que vivió él durante la adolescencia.

Mercedes Sánchez, finalmente, indicó que todas las personas que han contemplado la primera parte de la exposición han disfrutado mucho, por lo que estaba muy contenta de que su local albergara la segunda parte. Destacó que son obras “muy elaboradas e intimistas”, y dijo que García Trevijano había utilizado el arte como terapia y superación, además de que en los cuadros se percibe “mucha técnica”. Finalizó animando a todo el público sanroqueño a disfrutar de esta exposición.

En esta colección el artista representa su mundo de pensamientos, sensaciones y emociones. En la muestra se pueden ver piezas de gran tamaño y coloristas. Se trata de obra intimista en la que el pintor representa su mundo de emociones, vivencias e ideaciones, donde el color y el simbolismo son los grandes protagonistas.