de San Roque
Dos atractivas propuestas congregaron a un buen número de asistentes a “Carteia Lvdica” en la tarde de este martes. En primer lugar se pudo disfrutar de una amena conferencia sobre el circo de Carteia a cargo del arqueólogo Alejandro Jiménez, para a continuación desarrollarse una cata de alimentos de la época, como el garum. Este miércoles, a partir de las 20.30 horas, habrá una recreación de música romana.
La Delegación de Cultura del Ayuntamiento de San Roque organiza “Carteia Lvdica”, un festival de recreación histórica que se desarrolla hasta el próximo sábado y que incluye distintas propuestas enfocadas a todo tipo de público. Este martes hubo dos en el Museo Carteia de la calle San Felipe: una conferencia sobre el circo de la ciudad romana y, a continuación, una experiencia gastronómica muy amena.
La teniente de alcalde delegada de Cultura, Ana Ruiz, asitió a ambas actividades, y se encargó de la presentación de la conferencia, que corrió a cargo de Alejandro Jiménez, arqueólogo especializado en edificios de espectáculos de época romana. De hecho, Jiménez fue quien descubrió los restos del circo tras localizarlo gracias a unos estudios geofísicos, y lamentó que no se hayan ampliado las excavaciones del que denominó como “el mayor edificio de Carteia tras las murallas” pero también uno de los “más desconocidos”.
El circo se empleaba para las carreras de cuadrigas y fue construido en el siglo II después de Cristo, unos quinientos años después de fundarse la ciudad. Comohubo que excavar una zona y rellenar otra, además de que ocupaba una importante superficie donde antes había viviendas, Jiménez sospecha que a finales del siglo I después de Cristo hubo una importante remodelación de Carteia para convertirla en una “ciudad escaparate”, un símbolo del poder de Roma en el área del Estrecho aunque con menos habitantes que anteriormente.
Al finalizar la conferencia, Ana Ruiz entregó al ponente un obsequio de agradecimiento, consistente en una réplica del bucráneo de Carteia. También apuntó que desde el Ayuntamiento se va a reivindicar la reanudación de los estudios arqueológicos en el yacimiento.
A continuación tuvo lugar una cata a cargo de la empresa Arqueogastronomía, especializada en recrear alimentos romanos a partir de textos de la época y de restos de productos encontrados en lugares como Pompeya o Baelo Claudia. El director científico de este proyecto, Manuel León, fue el encargado de explicar cómo se realizaba y se degustaba el gárum, así como el sistema de producción y el consumo de productos como el vino, el queso y los embutidos.
Este miércoles, el grupo de arqueología musical Tintinnabulum ofrecerá, también en el Museo Municipal Carteia y a partir de las 20.30 horas, el recital “El tirso de Baco”, en el que recrearán las músicas romanas gracias a las investigaciones realizadas a partir de textos, mosaicos, pinturas y esculturas de la época.
El jueves 18, a las 20.30 horas, la compañía sanroqueña Sinsentido Teatro, que dirige Nadia Zumelaga, ofrecerá un paseo por el Museo Municipal bajo el título de “Mitos Carteienenses”.
El viernes 19, a las 10 de la mañana, Salvador Bravo, profesor y experto en la Historia de Roma, ejercerá como guía de excepción en una visita al Enclave Arqueológico de Carteia.
Finalmente, el sábado 20 a las 11.00 horas el Museo Municipal Carteia albergará unos talleres para la realización de réplicas de objetos romanos dirigidos a niñas y niños. Se pedía inscripción previa, y todas las plazas están cubiertas.
“Carteia Lvdica” es, por tanto, un festival de recreación histórica sobre el mundo romano que tiene como centro de gravedad la ciudad de Carteia, un yacimiento arqueológico declarado bien de interés cultural situado junto a la barriada de Guadarranque. Este enclave pertenece a la Red de Espacios Culturales de Andalucía.
De origen púnico, pasó a ser en época romana la Colonia Libertinorum Carteia, primera colonia latina establecida fuera de suelo itálico, constatándose su abandono a fines del siglo V o principios del VI, momento en que se instalan en Carteia los visigodos. Más tarde estuvo en manos musulmanas.