Presentación del libro “Retundi y los mundos de Ana”, de la linense Soledad Ruiz Santiago

La teniente de alcalde delegada de Bibliotecas, Pilar Núñez, acompañó a Soledad Ruiz Santiago en la presentación, e invitó a los asistentes a disfrutar tanto de la obra como de las palabras de la autora, quien en este relato “ha podido abrir la puerta de su fantasía”.

Por su parte, la escritora comenzó contando la historia de su vida: de su dura infancia, trabajando con sus padres desde los tres años en la recogida de algodón y de otros productos agrícolas; de su fantasía desbordante que la convirtieron en “la cuentacuentos de la familia”; y del apoyo de su madre y de su marido para cumplir su sueño: ser escritora.

Con 17 años aprendió a leer y a escribir gracias a la presidenta de la asociación de mujeres gitanas Nakera Romi de La Línea, Teresa Vélez. Poco después su relato “Los sueños de Rebeca” hizo que ganara el primer premio de un concurso organizado por la Asociación de Mujeres Victoria Kent. Tras unos años de postergar su sueño por causas familiares, le prometió a su madre antes de morir que iba a ser escritora, y ahora ha podido publicar este libro.

"Retundi y los mundos de Ana" es un cuento fabulado que nos transporta a un mundo de fantasía. Ana, la protagonista, es una pequeña ratoncita que decide salir en busca de su destino: convertirse en reina del mundo de Retundi. En ese viaje vivirá todo tipo de aventuras en las que irá conociendo a diversos personajes que la ayudarán en su periplo y que mostrarán poseer grandes valores humanos.

La princesa Ana deberá salir del mundo de Retundi, hasta encontrar en el mundo de los humanos al personaje que tendrá la clave de su destino. En el viaje contará con la ayuda de sus amigos, siempre fieles, y nos transportará tanto a adultos como a niños a un maravilloso mundo en el que la fantasía reina, tanto en las localizaciones de las aventuras como en los propios personajes: hadas, personajes malvados como la Grotesca Puf, el mago Gabriel, Rafael o Eliseo; se trata de personajes maravillosos, propios de los cuentos de hadas y llenos de valores como la amistad, el esfuerzo, el respeto a los mayores o la solidaridad.